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<dc:title lang="en-US">Anthropological musicalia in a minor key</dc:title>
<dc:title lang="es-ES">Musicalia antropológica en tono menor</dc:title>
<dc:creator>Lisón Tolosana, Carmelo</dc:creator>
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<dc:description lang="en-US">The one who always has background music when I work, the one who starts the enginethe car starts to sound Bach, Mozart or Beethoven, whoever has been in line at ten degreesbelow zero on a New Orleans street to get the privilege of having access to aaudition at Preservation Hall or who has religiously listened to concerts atEdinburgh, London, Paris, Munich, Venice, Milan, Berlin or Tokyo is not reason enough-I have to confess- so that I now turn to you, virtuosos in music and cognoscenti inmusics. Yes, there is a personally valid second ratio: I feel nostalgia and respect for thiscenter, locuspraecipuus anthropologisus that has periodically marked my academic workwith stop bars of the routine to gift me with true auditions of songs anddifferent styles, all lavish in teaching. In this auditorium I have learned a lot.What can I say about music, the art of art in Conrad's opinion? Certainly thatit is an immaterial biocultural phenomenon genetically programmed in its possibility butof whose origin in time we know nothing. Can we consider the chirping of birdsas a natural model predecessor? Schopenhauer gives music absolute primacyon the other arts and Vico thinks that it is the first expression of man, even prior to speech as we can read in the introductory manuals in his millennial searchof the origin of harmony. Incidentally, it seems likely that the ritual predates theword which can be analogical and musically significant. I do not know olddivinities averse to music nor do I remember having read ethnographic monographs of peoples without it; in my musical prehistory it is stated that at the sound of biblical trumpetsthe seven orders of walls of the city of Jericho fell and those trumpets will returnringing with glorious bells and also with terrifying tones on Judgment Day. TheGreeks in their wisdom assigned it a mythical origin, like the Jews.</dc:description>
<dc:description lang="es-ES">El que cuando trabajo tenga siempre música de fondo, el que al encender el motor del coche comience a sonar Bach, Mozart o Beethoven, el que haya estado en cola a diez grados bajo cero en una calle de Nueva Orleáns para conseguir el privilegio de tener acceso a una audición en el Preservation Hall o el que haya escuchado religiosamente conciertos en Edimburgo, Londres, París, Munich, Venecia, Milán, Berlín o Tokio no es razón suficiente -tengo que confesar- para que me dirija ahora a ustedes, virtuosos en música y cognoscenti en músicas. Hay sí una ratio secunda personalmente válida: siento nostalgia y respeto por esre centro, locuspraecipuus anthropologisus que ha marcado periódicamente mi quehacer académico con compases de stop de lo rutinario para obsequiarme con verdaderas audiciones de temas y estilos diferentes, pródigos todos en enseñanza. En este auditorio he aprendido mucho. ¿Qué puedo decir yo de la música, the art ofarts en opinión de Conrad? Ciertamente que es un fenómeno biocultural inmaterial genéticamente programado en su posibilidad pero de cuyo origen en el tiempo nada sabemos. ¿Podemos considerar el gorjeo de los pájaros como un predecesor modelo natural? Schopenhauer da a la música la primacía absoluta sobre las demás artes y Vico piensa que es la primera expresión del hombre, anterior incluso al habla según podemos leer en los manuales introductorios en su milenaria búsqueda del origen de la armonía. Dicho sea de paso, parece probable que el ritual es anterior a la palabra lo cual puede ser analógica y musicalmente significativo. N o conozco antiguas divinidades aversas a la música ni recuerdo haber leído monografías etnográficas de pueblos sin ella; en mi prehistoria musical consta que al sonido de las trompetas bíblicas cayeron los siete órdenes de murallas de la ciudad de Jericó y que esas trompetas volverán asonar con timbres gloriosos y también con tonos tremebundos el día del Juicio Final. Los griegos en su sabiduría le asignaron un origen mítico, como los judíos.</dc:description>
<dc:publisher lang="es-ES">Junta de Andalucía. Consejería de Turismo, Cultura y Deporte</dc:publisher>
<dc:date>1998-12-31</dc:date>
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<dc:source lang="en-US">Música Oral del Sur; No. 3 (1998): Música oral del Sur: international journal. ; 59 - 67</dc:source>
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<dc:rights lang="es-ES">Derechos de autor 1998 Carmelo Lisón Tolosana</dc:rights>
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